Quieres ser niñera. Estás decidida a trabajar cuidando niños. Pero seguro que, aunque lo has intentado, no tienes aún ni un sólo cliente. Has hecho todo lo que podías para conseguir a alguien que necesite cuidar de sus hijos, pero aún así no has conseguido nada.
¿Te sientes como un conductor de taxi que sólo da vueltas y más vueltas esperando a que alguien se suba en tu coche?
Si pensar en esto te hace sentir incómoda (y frustrada) porque ya no sabes qué más hacer para un conseguir un cliente (aunque sea UNO sólo) y empezar a trabajar como niñera, sigue leyendo…
Hay muchos clientes ahí fuera que están esperando a darte su dinero. Muchos, créeme
Te parecerá una tontería, pero mucha más gente de la que imaginas necesita a alguien como tú para cuidar niños. Pero hay una de estas dos cosas que les está impidiendo hacerlo:
- Puede que no sepan ni que existes, y que ¡eres la mejor niñera!
- Puede que no reconozcan la necesidad de tener a alguien que cuide de sus niños
Por desgracia, muchas niñeras (y también otro tipo de trabajadores) sólo se centran en cumplir el primer objetivo: publicitarse y hacerse conocer. Pero eso no es suficiente. Tienes que hacerles ver a los padres que no sólo te necesitan, sino también que quieren tenerte para cuidar a sus niños.
Teniendo estos dos puntos en cuenta, ya puedes empezar a construir tu estrategia para conseguir clientes como niñera, y que acabe tu desesperación por no tener ni un sólo cliente.
Créeme, cuando termines de leer este artículo, y pongas en práctica estos consejos, no tendrás un sólo cliente. Tendrás más clientes de los que puedas ocuparte, te lo aseguro.
No te conviertas en la mujer invisible
Por mucho que desees trabajar como niñera, y cuidar de niños, si no te mueves y haces que te conozcan, es como si fueses invisible. No existes para nadie – para nadie que necesite una canguro, claro -. Y obviamente, tampoco vas a conseguir a ningún cliente.
Así que lo primero que debes hacer es localizar a esas personas para las que quieres trabajar. Establece estos criterios:
- ¿Dónde están tus posibles clientes?
- ¿Qué edades tienen?
- ¿Dónde hay gente buscando una solución a su problema?
Estas preguntas son fáciles de responder si quieres trabajar como niñera. Puedes encontrar clientes potenciales a las salidas de los colegios, guarderías, en parques con columpios… Pero también debes tener en cuenta la edad.
Hay muchas niñeras que se niegan a cuidar bebés porque requieren cuidados especiales; otras, prefieren los niños mayores de 7 años. Así que establece el rango de edad que van a tener los pequeños que cuides según tus propias habilidades y experiencia.
Si no quieres cuidar bebés, es una tontería que vayas a una guardería para publicitar tus servicios.
Y la última pregunta: ¿dónde hay gente buscando solución a su problema? Seguro que ya lo has adivinado, ¡en Internet! Muchos padres que necesitan a alguien para que esté con sus hijos ponen anuncios en la red para contratar a niñeras.
Pero también encontrarás muchas ofertas en la sección de empleo de cualquier periódico.
Así que ponte manos a la obra, compra el diario que más te guste todos los días, y empieza a contestar a todas las ofertas que veas y te interesen. Si tienes que enviar un email con tu candidatura, recuerda que debe ser corto, con un título atractivo, y específico.
NADIE te contratará (a menos que hagas esto)
Una vez que ya has localizado los colegios y guarderías más cercanos, y sabes la edad que quieres que tengan los pequeños que cuidarás, lo siguiente es darte a conocer. Si no haces esto, NADIE va a contratarte, porque no sabrán siquiera que existes.
Busca en Internet algún sitio donde hagan tarjetas de visita gratis, o que tengan plantillas para estas tarjetas. La web Vistaprint es una de las imprentas virtuales más famosa.
Puedes hacer tus tarjetas de visita totalmente gratis, pagando sólo el envío de éstas. O pagar un poco más, y personalizarlas a tu antojo.
También puedes poner en Google “plantillas para tarjetas de visita”, insertar tus datos, e imprimirlas en tu propia casa (aunque no te recomiendo del todo esta opción, porque puede que gastes más de la cuenta en material y tinta, y no obtengas el resultado que quieres), o llevarlas a una imprenta.
Ve a los sitios que localizaste antes (colegios, parques, etc.) y preséntate a las madres y padres y dales tus tarjetas de visita. Diles quién eres, por qué disfrutas al cuidar niños, cuándo estás disponible, qué tipo de actividades divertidas harías con sus hijos…
Habla también con el niño preguntándole cómo está, si le gusta el colegio, o cuáles son sus juegos favoritos. Así darás la impresión de que eres una persona amable que tiene verdadero interés por ellos.
Para incrementar tus posibilidades de tener más clientes, haz un flyer o anuncio en el que publicites tus servicios. Abre un documento de Word y crea un panfleto divertido con tus datos, o busca webs en las que ofrezcan plantillas para ello.
Pégalo cerca de sitios a los que se suela ir con niños, como pastelerías, tiendas de chucherías, o lugares que las madres visiten a menudo (un supermercado, una tienda de ropa femenina, una frutería, etc.)
¡Una pequeña fiesta no hace daño a nadie!
¿Recuerdas el punto en el que te hablaba de que los clientes puede que no reconozcan la necesidad de tener a alguien que cuide de sus niños? ¡Demuéstrales lo contrario! Hazles ver que de verdad necesitan a alguien para cuidar de sus niños, y que es a ti a quien quieren.
Muchos padres piensan que no requieren a nadie más para ayudarles con sus pequeños (aunque realmente necesiten una niñera), sobre todo porque tienen miedo de que la otra persona no sea de confianza, o porque piensan que no sabrá tratar a sus hijos.
¿Cómo puedes cambiar eso? ¡Haciendo una fiesta! Móntala en tu propia casa y asegúrate de invitar a niños a los que puedas cuidar, así como a sus padres.
Para que no te tomen por una loca (¡o algo peor!), es mejor que los invitados sean gente que te conozca un poco, aunque sea de vista. Recorre tu vecindario con invitaciones y llama a las casas de los vecinos que tengan niños.
En la fiesta, demuéstrales a los padres lo responsable que eres así como tus habilidades como niñera. Asegúrate de dejar también una impresión positiva en los niños. Seguro que así conseguirás algún cliente.
Recuerda decirles a los padres antes de que se marchen de la fiesta que, si alguna vez tienen que ir a algún sitio, tú estás disponible y más que feliz de cuidar de sus hijos. Y ¡que no se te olvide darles una de tus tarjetas de visita!
Te aseguro que siguiendo estos pasos, conseguirás más clientes de los que podías imaginar. Pero recuerda esto:
Lo más crucial cuando consigas a tu primer cliente NO es el dinero. Es la opinión que tengan de ti.
Lo más crucial cuando consigas a tu primer cliente NO es el dinero. Es la opinión que tengan de ti.
El boca a boca siempre funciona, pero puede ir a tu favor o en tu contra. Si el primer niño al que has cuidado, sus padres están contentos contigo, seguro que empiezas a recibir llamadas de otra gente; pero si no quedan satisfechos con tus servicios, quizás nadie más te llame para ofrecerte trabajo de niñera.