Si estás buscando una idea de negocio que requiera poca inversión, y que puedas iniciar relativamente rápido con poco esfuerzo, puede que un negocio de limpieza sea el emprendimiento ideal para ti.
Sin embargo, debes tener en cuenta que, al ser un tipo de empresa fácil de montar, la competencia será también alta, con una industria dominada principalmente por pequeñas organizaciones.
Por eso necesitarás tener una visión clara del lugar en el que se posicionará tu negocio de limpieza dentro de este mercado algo saturado y encontrar el nicho adecuado para ello.
Así que lee los 5 pasos simples que debes dar para comenzar el camino hacia el éxito, y algunos consejos que te serán muy útiles.
1. Determina en qué tipo de negocio de limpieza vas a especializarte
Hay tres tipos principales de compañías de limpieza:
- Doméstica. Consiste en limpiar los domicilios privados de la gente (normalmente cuando no están en casa) y podrás empezarlo tú solo. Con el tiempo, cuando tengas una buena clientela, será mejor contratar empleados adicionales.
- Comercial. Este tipo de limpieza involucra limpiar propiedades comerciales (oficinas de empresas, centros comerciales), para lo que sí necesitarás un equipo de trabajadores, y tu papel consistirá más en gestionar que en la limpieza en sí.
- Especializada. Aquí hay cientos de nichos que puedes explorar, desde limpiar ventanas, a colegios, automóviles, o incluso escenas de crímenes (sí, hay empresas especializadas en esto).
Debes pensar en los talentos que tienes o en qué es lo que quieres; ¿estás preparado para limpiar todos los días, o lo tuyo es más la parte administrativa de un negocio?
Analiza a su vez cuál es la mejor oportunidad de mercado que hay en tu zona. Si vives en área llena de tiendas, quizás lo ideal sea que te dediques a la limpieza comercial. Piensa bien y analiza tu localidad.
2. Investiga, investiga, investiga
Como ya te dije antes, investigar tu mercado potencial y la población demográfica local será clave para determinar el tipo de negocio de limpieza que debes iniciar.
Si planeas manejar un emprendimiento de limpieza doméstica, asegúrate de que la gente de tu localidad sea económicamente capaz de pagar a alguien por realizar las tareas de la casa.
O, si es un comercio, de que éste tenga suficientes ventas como para invertir sus beneficios en pagarte a ti.
3. Decide cuál será tu modelo de negocio
¿Vas a montar un negocio independiente, o quizás ser un franquiciado es una buena opción para ti? En esta parte, es importante que pienses en tus metas a largo plazo.
Si estás pensando en un emprendimiento que tú puedas hacer crecer despacio, pero establemente, y del que seas tú quien tenga el control total, probablemente tu mejor opción sea montarlo por tu propia cuenta.
Sin embargo, si lo que quieres es beneficios rápidos, y te preocupan algunos aspectos de cómo levantar o manejar un negocio de este tipo, considera el hacerte franquiciado de otra empresa de limpieza.
4. Realiza un presupuesto para tu equipamiento
Los costes de un equipamiento de limpieza pueden variar considerablemente. Los limpiadores domésticos, por ejemplo, normalmente reciben estos materiales de los dueños de las casas (detergentes, fregonas, etc.)
Pero si piensas lanzar un negocio de limpieza comercial, será necesario que inviertas en algún equipo básico como:
- Carros de limpieza para llevar los productos
- Aspiradoras o máquinas de vapor industriales
- Fregadoras de suelos o mopas
- Y, por supuesto, un auto en el que transportar todo el equipo
Como puedes ver, todo el equipo listado arriba puede llegar a costarte $10.000 o más, así que es importante que pienses si tienes el dinero o puedes conseguir un préstamo para comprarlo, así como el tiempo que tardarás en recuperarlo con tus beneficios.
Sin olvidar claro que, si contratas a otros para ayudarte con las faenas, éstos tendrán un sueldo que cobrar y que tendrás que incluir en tu presupuesto.
(Leer: Tipos de préstamos para negocios y cuál es el mejor para ti)
5. Crea un plan de marketing
Una vez que hayas pensado en tu modelo de negocio, qué tipo de limpiezas realizarás, y hayas conseguido el dinero para los productos, equipamiento, o empleados necesarios, puedes iniciar tu negocio de limpieza.
Pero el siguiente paso es posiblemente la parte más importante: conseguir clientes. Y esto sólo lo lograrás con un buen plan de marketing. Dependiendo de tu tipo de empresa, algunos carteles o anuncios en periódicos pueden ser el mejor lugar donde empezar.
No descartes tampoco otros métodos como las redes sociales, o anuncios en Internet de pago (en buscadores como Google), especialmente si tu negocio de limpieza es especializado.
(Leer: Cómo promocionar un negocio gratis para conseguir clientes)
Tampoco tengas miedo de ir casa por casa dejando algunas tarjetas de visita para tus posibles clientes – la limpieza es un negocio personal y no hay nada mejor que la primera vez que te conozcan sea cara a cara en vez de a través de un cartel.
Tanto antes de iniciar tu negocio de limpieza, como mientras estés manejándolo una vez en funcionamiento, hay cuatro consejos clave que debes seguir si quieres lograr el éxito y unos ingresos estables.
1. Debes construir confianza en tus clientes
Uno de los elementos más importantes en este tipo de negocio es la confianza (al fin y al cabo, tus clientes dejarán que entres en sus casas o sus trabajos). Y una de las cosas que más confianza transmite es la imagen, sea de una persona, o de una empresa.
Asegúrate de que:
- Tú y tus empleados luzcáis limpios, con un buen uniforme o al menos ropa en condiciones para el trabajo.
- Tus facturas tengan el logotipo impreso de tu negocio, y estén hechas por ordenador (una factura a mano puede parecer poco profesional)
- Tú y tus empleados tengáis un trato amable y educado cuando habléis a los clientes
- Tienes todos los papeles necesarios, como licencias (si es que necesitas una), o seguros médicos para ti y tus empleados
Suscribirte a algún tipo de organización de tu sector será también una garantía de confianza para tus clientes. Y no olvides pedir un certificado de antecedentes penales si contratas a otros empleados.
Esto mejorará tu imagen como un profesional en el que se puede confianzar.
Tampoco necesitarás un certificado de entrenamiento, pero si puedes obtener uno (al igual que tus empleados) será una buena manera de aumentar tu credibilidad.
2. ¿Qué precio poner a tus servicios?
Poner un precio a tus servicios puede ser tedioso y consumir tiempo, pero especialmente al principio, no te apresures con este proceso.
Si tu tarifa es demasiado baja, estarás “robándote” a ti mismo de los beneficios que consigas o estarás forzado a bajar la calidad de tu trabajo para igualarlo con el precio; si tu tarifa es demasiado alta, seguro que perderás muchos clientes.
Recuerda que en las tareas de limpieza (sobre todo en las domésticas) tu competencia más directa será tu cliente. Si cobras demasiado, pensará “por ese precio, puedo hacerlo yo mismo o misma”.
En los primeros días, analiza cuidadosamente cuánto has cobrado y el precio del trabajo total que realizaste para tener una buena estimación real y saber si tu tarifa establecida es la adecuada.
3. Un vehículo es más importante de lo que parece
Debido a que tu trabajo se hace en distintos lugares, tener un vehículo sólo para tu negocio es tan importante como el resto de aspectos; de hecho, un auto será como tu negocio sobre ruedas.
Necesitas escoger uno adecuado para tu tipo de negocio de limpieza y que esté en buenas condiciones. Para un servicio de limpieza doméstica, con un coche utilitario o un monovolumen será suficiente.
Si, por el contrario, te vas a dedicar a la limpieza comercial, necesitarás un auto más grande dependiendo de tu equipo y su tamaño. No te olvides tampoco de tus empleados si contratas a algunos.
Deja claro desde el primer día en que los contrates si van a ser ellos los que tendrán que poner su propio carro, si en este caso les pagarás o no la gasolina, o si serás tú quien les proporcionarás un automóvil.
4. Escoge dónde basarás tu negocio
Muchos negocios de limpieza hoy día tienen su “cuartel general” en sus propias casas: es una buena forma de ahorrar dinero en temas como el alquiler de un local, la luz y otros gastos que conllevan este tipo de espacios.
Si tu tipo de negocio será de limpiezas domésticas, seguro que en tu propia casa tendrás un pequeño espacio para guardar los materiales de trabajo.
Pero ¿qué pasa si quieres dedicarte a la limpieza comercial o especializada? Lo más evidente es que no tengas sitio suficiente para las máquinas que vas a usar.
Así que piensa bien si necesitarás un local para establecer allí tu oficina y tu almacén, o si con un pequeño guardamuebles podrás apañarte al principio hasta que tu clientela crezca.
Por último, ten en cuenta si en tu país o ciudad existen regulaciones sanitarias o de seguridad relativas a este negocio, ya que la limpieza involucra manejar productos químicos a veces muy peligrosos.